El Cuerpo General de la Policía Canaria, a través del Grupo de Transportes de la Unidad de Vigilancia e Inspección Administrativa (UVIA), llevó a cabo, en Tenerife, una campaña dirigida al control e inspección de los vehículos de transporte discrecional especial de viajeros, los cuales deben reunir los requisitos específicos para la realización del Transporte Escolar.
Mediante el operativo, los agentes inspeccionaron diferentes vehículos repercutiendo en la detección y propuesta de sanción de los comportamientos irregulares que se observaron por la carencia de la documentación exigida, llevando a cabo 16 propuestas de sanción.
La actividad de transporte escolar, definido en los términos del artículo 76 de la Ley de Ordenación del Transporte por Carretera de Canarias, y el artículo 86 del Reglamento de desarrollo de la norma, exige la previa obtención de la autorización específica de transporte escolar otorgada a los solicitantes por parte del Cabildo Insular correspondiente, una vez analizados determinados requisitos.
En primer lugar, se debe estar en posesión de una autorización de transporte discrecional de viajeros. Además, los vehículos deben reunir las condiciones técnicas y de seguridad exigidos por la normativa aplicable y, por último, se comprueba que se haya convenido previamente con los representantes de los usuarios de dicho transporte, según se acredite con la presentación de contrato o pre-contrato con el centro educativo.
La Unidad de Vigilancia e Inspección Administrativa tiene, entre sus funciones, la actuación policial preventiva, de investigación y denuncia de infracciones administrativas en los ámbitos de, entre otros, medio ambiente y recursos naturales, ordenación del turismo en Canarias, patrimonio cultural canario, Administración Tributaria, transporte, juego y apuestas, así como aquellas otras que le sean encomendadas, de conformidad con la Resolución de 16 de enero de 2024, de la Dirección General de Seguridad.
