Un hallazgo sorprendente ha captado la atención de residentes y turistas en el sur de Gran Canaria. Esta mañana, un calamar gigante (Architeuthis dux) apareció varado en la playa de Bahía Feliz, en el municipio de San Bartolomé de Tirajana, causando asombro entre quienes se encontraban en el lugar.
El ejemplar, que se estima podría medir más de 2 metros de largo, fue descubierto en la orilla de la playa, donde quedó atrapado por las aguas poco profundas. Esta especie, conocida por su tamaño colosal y su capacidad para habitar a profundidades de hasta 1.000 metros, rara vez se acerca a las costas, lo que convierte a este hallazgo en un fenómeno excepcional.
Bañistas y curiosos se agruparon rápidamente en torno al animal, que se encontraba en buenas condiciones generales, aunque evidentemente fuera de su hábitat natural. Personal de emergencias y un equipo de biólogos marinos llegaron al lugar para asegurar que el ejemplar no sufriese daños adicionales y proceder con su retirada.
La presencia de un calamar gigante cerca de la costa ha generado especulaciones entre los expertos, que no descartan que este animal haya sido empujado hacia las orillas por cambios en las corrientes marinas o incluso una posible anomalía en el ecosistema marino. A pesar de su tamaño imponente, estos calamares viven en aguas profundas y es muy poco habitual que lleguen hasta la arena.