El Gobierno de Canarias ha informado esta mañana que el vertido de combustible detectado en las costas de Gran Canaria ha desaparecido del mar, según ha confirmado un vuelo de reconocimiento realizado en las primeras horas del día.
Desde que se detectó el incidente, las autoridades activaron un operativo de emergencia para contener la mancha y evitar que el vertido se expandiera. Equipos especializados de limpieza han estado trabajando de manera intensiva en la zona afectada, tanto en el mar como en las costas, para mitigar los daños ambientales.
El Gobierno ha destacado que, aunque la mancha ha desaparecido del mar, se mantendrán las labores de vigilancia y limpieza en las playas cercanas para asegurar que no quede ningún rastro de contaminación. Asimismo, se continuarán realizando análisis de la calidad del agua para garantizar que no haya riesgos para la fauna marina ni para las actividades turísticas.
Las autoridades han agradecido la colaboración de las instituciones locales y los voluntarios que se han sumado a las labores de limpieza, y han asegurado que seguirán trabajando para evitar que se repitan situaciones similares en el futuro.
Investigación en curso
Por su parte, se ha iniciado una investigación para determinar las causas exactas del vertido y depurar responsabilidades. Aunque aún no se ha confirmado el origen del derrame, se sospecha que podría estar relacionado con el tráfico marítimo en la zona.
El Gobierno de Canarias ha reiterado su compromiso con la protección del medio ambiente y ha instado a las empresas y embarcaciones que operan en aguas canarias a extremar las precauciones para evitar futuros incidentes de este tipo.
La situación, que inicialmente generó preocupación por sus posibles impactos en el ecosistema marino, parece ahora estar bajo control, gracias a la rápida respuesta de las autoridades y el esfuerzo coordinado de las distintas entidades implicadas.
