Nueva Canarias-Bloque Canarista (NC-BC) reclamó hoy al presidente del Gobierno de Canarais, Fernando Clavijo, que dé la cara y comparezca urgentemente, a iniciativa propia, en el Parlamento para explicar su sometimiento a la política expansionista del reino de Marruecos, su traición al pueblo saharaui y por dar espalda a la sociedad canaria, a la legalidad internacional, a los derechos humanos, al Tribunal de Justicia Europeo (TJUE) y a su propia formación política al apoyar la propuesta de autonomía para el Sáhara Occidental. El presidente de NC-BC, Román Rodríguez exigió al jefe del Ejecutivo de CC y el PP que comparta la información obtenida en Rabat relativa al acuerdo “problemático” sobre la devolución de los menores migrantes no acompañados procedentes del país alauita y sobre el resto de los asuntos “sensjbles” pendientes para el Archipiélago y el Sáhara Occidental. Se trata de las maniobras militares, las prospecciones petrolíferas y la delimitación unilateral de las fronteras marítimas por parte de Marruecos.
Fernando Clavijo se debe al control parlamentario en uno de los asuntos más graves tratados por un presidente canario en décadas, según el responsable del canarismo progresista y jefe del Ejecutivo entre 1999 y 2003.
El responsable del canarismo de progreso demandó una aclaración sobre los términos del acuerdo cerrado, “no con el primer ministro, sino con el ministro de Exteriores”, para devolver a los menores alauitas que “huyen de su país”. Rodríguez dudó de las competencias del Gobierno de Canarias para proceder con estas devoluciones además de calificar como “sorprendente” que se obligue a retornar a unos chicos que deciden abandonar su familia y entorno. “Toda una lección de humanismo” de Clavijo, observó el presidente de NC-BC.
“Tiene que explicar ese radical y grave” cambio de postura, ese “sometimiento, subordinación” al reino alauita en un asunto tan complejo para el futuro del pueblo saharaui, para el Archipiélago y desde el punto de vista del Estado español y la tensionada política internacional.
Este tipo de decisiones tan relevantes, para el presidente de NC-BC, “como mínimo, se tienen que debatir y es el Parlamento donde está representada” la sociedad canaria. Román Rodríguez se preguntó si las consecuencias del viaje a Rabat, del pasado martes, están relacionadas con las últimas maniobras militares realizadas por Marruecos cerca del Archipiélago y el Sáhara Occidental, que se anunciaron que continuarán hasta finales del próximo mes de diciembre.
Con el mismo tono de preocupación se refirió a las prospecciones petrolíferas autorizadas por el reino alauita en aguas cercanas a las costas de Fuerteventura y Lanzarote. Actividades que, como recordó, son un riesgo ambiental con afecciones para el turismo y la actividad pesquera en las islas. Pero, sobre todo, por la incertidumbre de que pudieran realizarse en aguas próximas a la zona aún sin delimitar.
Rodríguez se interesó por la decisión de Marruecos en 2020 de delimitar unilateralmente sus fronteras marítimas, mediante la aprobación de dos leyes, incluyendo aguas próximas al Sáhara Occidental y Canarias, parte de estas últimas solicitadas por España ante las Naciones Unidas (ONU). Se refirió a la solicitud pendiente de resolución del Estado español en 2014 a la Comisión de Límites de la Plataforma Continental de la ONU para ampliar su plataforma continental alrededor de Canarias.
Román Rodríguez recordó que la ONU reconoce al Sáhara Occidental como un territorio no autónomo y apoya el proceso de autodeterminación a través de la Misión de las Naciones Unidas para el Referéndum, la Minurso. El presidente de Nueva Canarias-BC afirmó que Clavijo tiene la obligación de informar al Parlamento.
