La paraguaya Romina Celeste, de 29 años, fue la primera víctima de violencia de género de 2019 y cuatro años después no se ha podido averiguar cómo murió. Su marido, ingeniero industrial, de 44 años, declaró tras ser detenido que volvió a casa la noche de Año Nuevo tras consumir drogas y la encontró muerta. Se asustó, descuartizó el cuerpo y quemó al menos una parte en la barbacoa que tenían en el jardín.
Los vecinos, alarmados por el hedor y las llamas, se presentaron en la casa y él, con total tranquilidad, les contó que estaba haciendo un asado. Una semana después, tras las insistentes llamadas de la madre de Romina, se presentó en el cuartel de la Guardia Civil y denunció la desaparición de su mujer en un intento de despejarse el camino.
Este viernes, a más tardar, esa es la fecha en la que Raúl Díaz, marido de la joven paraguaya Romina Celeste Núñez a la que presuntamente mató, descuartizó y quemó en una barbacoa, saldrá de la cárcel de Tahiche en libertad condicional.
La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Las Palmas decreta la libertad sin fianza del acusado por la muerte violenta de su mujer en Costa Teguise (Lanzarote) en las navidades de 2019, al cumplirse el tiempo máximo que permite la ley para el mantenimiento en prisión provisional (dos años+dos años de prórroga).
El acusado debe comparecer todos los lunes en sede judicial, debe designar domicilio en España y está obligado a notificar cuantos cambios de domicilio verifique, igualmente, se le prohíbe salir del territorio nacional, se le retira el pasaporte y se prohíbe la expedición de uno nuevo.
Respecto al juicio que tiene pendiente, se señalará una vez que el TSJC resuelva el recurso presentado por su defensa contra el auto de cuestiones previas del proceso ante el jurado, que precisamente hoy ha entrado en la Sala de lo Penal del TSJC
