El grupo parlamentario VOX en Canarias ha pedido la paralización de las importaciones con Marruecos. Respecto a la entrada de productos en mal estado desde este país a España, insiste en que el Gobierno canario tome medidas de protección sanitaria ante la reiterada entrada de fresas contaminadas con Hepatitis A procedentes de Marruecos que contenían restos fecales. A esto se añade que, desde el pasado 29 de junio de 2022, la Unión Europea permite a Marruecos la entrada de carne de aves de corral a través del Reglamento 2022/1040, con lo que esto puede llegar a provocar en el mercado canario avícola y a la salud de la población.
“Nuestra prioridad”, insiste el portavoz de Vox del Parlamento de Canarias, Nicasio Galván, “es la protección del producto canario y de los canarios”. Según ha incidido Galván, “estamos ante un sumatorio de situaciones de gravedad que exigen del Estado un posicionamiento frente al desamparo al que nos expone Europa”. Del Gobierno canario, añade, “esperamos medidas de urgencia para la protección de su población”.
Otro de los problemas que podría afectar al Archipiélago en este sentido incide en la posible conexión para esta apertura de los puertos de Tarfaya y Puerto del Rosario. En aras de evitar esta exposición del Archipiélago a través de los puestos de inspección fronteriza, a nivel nacional VOX registró este mes preguntas de control a la mesa del Congreso. En ellas, se alentó al Gobierno de la Nación a paralizar las importaciones desde el Puerto de Tarfaya hasta que se establezcan los controles pertinentes en Puerto del Rosario. Y en ese espacio de tiempo la necesidad de evitar la conexión resulta crucial para garantizar la salud de los consumidores canarios.
Por tanto, desde el Congreso VOX indagará en cuándo se prevé que Puerto del Rosario cuente con el Puesto de Inspección Fronterizo, actualmente pendiente de autorización por parte de la Oficina Alimentaria y Veterinaria de la Comisión Europea. Asimismo, desde esta institución Vox quiere que el Estado responda a cuántos veterinarios e inspectores se destinarán al futuro PIF del Puerto del Rosario y qué análisis ha llevado a cabo el Gobierno para establecer el número de veterinarios e inspectores necesarios para garantizar la seguridad de nuestro sector primario.
A este blindaje propuesto por el grupo parlamentario VOX debido a hechos recientes que ponen de manifiesto la fragilidad de estas operaciones comerciales de productos alimenticios, las siglas añaden el agravante de la competencia desleal.
Aves de corral
Desde 2022, la puerta para comerciar con aves de corral procedentes de Marruecos se ha abierto y esta entrada afectará aún más al sector avícola canario si se activa para este fin la línea de Puerto del Rosario y Tarfaya.
Tal y como ha manifestado el sector avícola español y canario, la inclusión de Marruecos en esta lista de países importadores genera amenazas en seguridad alimentaria, en competencia desleal (ya que la normativa impuesta a estos países es más laxa que la que la propia Unión Europea impone a los países miembros). Cabe añadir el daño que supone para los empleos de cientos de empresas canarias dedicadas a la producción cárnica avícola, de huevos y de piensos para el sector ganadero.
Cerca de 7.000 familias del sector de pollos y pavos pueden ver peligrar sus puestos de trabajo. Como se ha comprobado en otros lugares de España, la competencia desleal ya causa estragos. Los agricultores de Almería y Murcia ya están sufriendo un gran varapalo ante la importación de 57,92 millones de kilos de tomate desde Marruecos en 2023, lo que supone un aumento del 27,4% respecto a cinco años atrás.
El diputado de la Comisión de Agricultura, Ganadería y Pesca del grupo parlamentario, Javier Nieto, ha alertado de “la ruina a la que exponemos a los profesionales de la agricultura y ganadería” si no se produce por parte de Europa un regreso “al sentido común”.
Expuestas dichas medidas regionales y nacionales en torno a la defensa de nuestros productos, y manifestada la necesaria protección de nuestros puertos en Canarias, enfatiza Galván, “es imperativo repensar las últimas actuaciones de Europa consentidas por España, qué sentido tiene tratar de solucionar los precios al alza de nuestros productos debido al coste de producción y medidas sanitarias altamente exigentes en los países de la Unión si a su vez permitimos la importación de naciones como Marruecos y terceras con una laxa inspección sanitaria. La tragedia se cuenta sola”, concluye Galván.
