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La Unidad Especial de Guardia y Operaciones de la Policía (UE-GOIA) intervino ayer tras recibir un aviso vecinal por gritos procedentes del interior de una vivienda, en lo que inicialmente parecía un posible caso de violencia de género.
La actuación policial culminó con la detención de un hombre que había incumplido una orden de alejamiento respecto a la mujer afectada. El detenido fue puesto a disposición judicial, mientras que la víctima recibió asistencia y protección por parte de los servicios competentes.
Las autoridades recuerdan la importancia de denunciar cualquier indicio de violencia de género y destacan que el incumplimiento de las medidas de protección como las órdenes de alejamiento conlleva consecuencias legales graves.
