La portavoz municipal del PP en Güímar, Carmen Luisa Castro, tacha de «injustificado e inmoral» el incremento del gasto en sueldos del gobierno municipal y su personal de confianza, aprobado esta semana en el Pleno del Ayuntamiento con los votos de CC, PSOE y Unidas Sí Podemos (USP), y por el cual la población güimarera deberá afrontar con el pago de sus impuestos al menos medio millón de euros más en los próximos 4 años. El alcalde ganará 58.080 euros brutos y el resto de concejales entre 46.000 y 46.500 brutos al año, 10.000 más brutos al año que hasta ahora.
La estimación de este coste para los bolsillos de los vecinos es fácil de calcular. Nueve ediles costarán 10.000 euros más al mes, lo que hace 360.000 euros en el cuatrienio; a lo que hay que añadir 116.000 euros del nuevo puesto de confianza (29.000 brutos mensuales); y el mayor gasto en dietas de dos concejales en Juntas de Gobierno (a razón de 166 más por cada sesión para cada uno y teniendo en cuenta que hay meses en que se celebran cuatro juntas).
«¿Cuánto se podría hacer en servicios sociales, en bonificaciones fiscales a las pymes, en subvenciones para emprendedores, en becas, en fomentar el empleo, en obras… con ese dinero?», se pregunta la exalcaldesa, quien estima que la cuantía que debe poner cada habitante de Güímar para pagar este gasto extra supera los 20 euros.
Luisi Castro, clara ganadora de las elecciones del pasado 28 de mayo con casi el 40% de los votos, considera «surrealistas» las explicaciones que para tamaña subida salarial ha dado el gobierno tripartito, como es el de que Güímar tiene ya más de 20.000 habitantes y la normativa permite ahora un tope más alto de sueldos (además de una corporación municipal mayor) o el de la responsabilidad que entrañan las áreas de gobierno e incluso que la mayoría de ediles gobernantes tenga una profesión en la que ganaban más fuera de la política. “Meras excusas para cobrar más”, enfatiza la líder popular.
La “incoherencia” de Unidas Sí Podemos
Le llama poderosamente la atención al PP güimarero que una formación política como Unidas Sí Podemos (integrada por Izquierda Unida, Sí se puede y Podemos) se haya prestado a “esta desproporcionada subida de sueldos, después de todo lo que han atacado este tipo de conductas en la política, hasta el punto de que han pretendido darnos lecciones de moral a los demás partidos”.
Ante las críticas de los concejales del PP, la única respuesta de la representante de USP es que tuvo que «ceder» ante sus socios de gobierno aunque no era partidaria de aumentar este gasto; pero la realidad, subraya Luisi castro, es que no vaciló en levantar su mano para votar a favor de esta propuesta en el pleno, haciendo gala de una “llamativa incoherencia”.
«Tampoco es ningún consuelo para los contribuyentes el que Nayra Caraballero diga que la parte de su sueldo que excede de lo que ganaba como profesora lo va a donar, porque en realidad el coste es el mismo para las arcas municipales», agrega la edil popular.
“Ridículas” asignaciones a la oposición
Luisi Castro no cuestionó durante la sesión plenaria la legalidad de subirse el sueldo, pero sí reprobó que no tuviera en el expediente una mínima motivación o justificación, más allá del mero «descaro» del nuevo gobierno tripartito de aprovechar que, al pasar Güímar de 20.000 habitantes (tiene 21.200), ahora el límite de los salarios que permite la ley es superior. «No todo lo que es legal es moral», enfatiza la exalcaldesa del PP.
Igualmente, el PP cuestiona la «artimaña» utilizada para que Airam Puerta (PSOE) y Javier Delgado (CC) tengan régimen de dedicación al 75% pero cobren tanto como quienes tienen dedicación exclusiva, asignándoles un plus mensual de 830 euros, para que puedan compatibilizarlo con otras actividades económicas fuera del Ayuntamiento. No menos sorprendente es que a los dos concejales no liberados y que, por tanto, no cobran del Ayuntamiento, se les suba de casi 36 a 200 euros la dieta por asistir a las juntas de gobierno, lo que prácticamente puede reportarles una especie de «sueldo encubierto, expresión que no les gustó en el Pleno, pero que nada tiene de incierto”.
En contraste con esta «mano ancha» de CC, PSOE y USP para subirse sus remuneraciones, el PP se quejó en la sesión plenaria de las «ridículas» asignaciones económicas a la oposición: 40 euros por pleno (unos 7 euros más que el pasado mandato) y 17 euros por junta de portavoces (misma cantidad que antes), cuantías muy inferiores a las de otros ayuntamientos, pero que el gobierno tripartito se negó a incrementar.
En todo caso, Luisi Castro deja meridianamente claro que el PP «no va a caer en la trampa de CC, PSOE y USP para poner una cortina de humo sobre su escandalosa subida salarial con esta petición de mejorar las dietas por parte de la oposición, pero sí quiere dejar patente la malicia, arbitrariedad y desigualdad de criterio de la propuesta aprobada en el Pleno y el desprecio a la labor de la oposición, cuya función de fiscalización es tan importante como la de la gobernar».