A día de hoy, varios jugadores de diferentes equipos de la isla nos hemos unificado en esta asociación para solicitar que se nos ceda (o en su defecto nos autoricen a usar de forma no exclusiva) un espacio acondicionado y que permita mantener la gratuidad de acceso al hobby, ya que en nuestra isla no existen instalaciones dedicadas al airsoft, públicas y de acceso libre, o privadas con acceso pagado.
En primer lugar, explicar un poco lo que es el airsoft. Para ello, es tan sencillo como leer la breve explicación que incluye la Federación Española de Airsoft (FEA) en su normativa más reciente:
«El Airsoft es un juego de estrategia y simulación. Tiene una vertiente recreativa o lúdica y otra competitiva o deportiva. Para practicarlo los jugadores de Airsoft utilizan ALD’s (Armas Lúdico Deportivas de Airsoft a escala real de armas de fuego) que lanzan pequeñas bolas de materiales biodegradables, a menos de 3 julios de potencia. Su práctica no implica apología del belicismo o la violencia, ni ninguna conexión política, religiosa, excluyente o ilegal. Las reglas del juego del Airsoft fueron creadas con el objetivo de conseguir una adecuada regulación y mayor seguridad. Las reglas del juego son de uso obligatorio para todas las Asociaciones miembros de la Federación. El respeto y la honradez entre jugadores es la regla fundamental para desarrollar con normalidad esta actividad, ya que un impacto de una bola de Airsoft no deja huella. Solo la nobleza, la sinceridad y la aceptación de haber sido alcanzado, serán la prueba. Es por eso que ante todo y sobre todo, el Airsoft es un deporte de honor.»
Se puede realizar en espacios cerrados o en campo abierto, buscando siempre que haya elementos que permitan la cobertura de los jugadores (muros, montículos, atrezzo…) para que sea un juego dinámico y variado.
Los modos de juego más comunes son el duelo por equipos (vidas de los jugadores limitadas, el objetivo es la eliminación), la captura de la bandera (y llevarla a la base propia) o el asalto y defensa (un equipo posicionado defiende y otro debe tomar la posición).
En Lanzarote, en los años que se lleva realizando esta práctica deportiva, ha tenido que beber de la crisis del ladrillo y el consiguiente abandono de edificaciones, ya que suponen un terreno de juego excelente para esta práctica. Además, se suele realizar en zonas residuales con marcada acción humana, pero en abandono, para evitar molestar o alarmar a la población, y señalando siempre la zona de juego y el acceso para que no se produzcan impactos accidentales contra cualquier posible transeúnte (en caso de que alguien apareciese en la zona de juego este se detiene inmediatamente por seguridad).
La asociación pretende servir de puente entre población, jugadores y autoridades, procurando que los jugadores hagan una práctica responsable de Airsoft, buscando ceñirnos a la legalidad lo máximo posible, tal y como se viene haciendo desde hace años con un correcto registro de las réplicas (armas de categoría 4.1 o 4.2 según el modo de disparo) y con el pago de seguro de responsabilidad civil por la mayor parte de jugadores. Además, abogamos por el respeto al medio ambiente, usando obligatoriamente proyectiles biodegradables y evitando siempre dejar restos o residuos en las zonas de juego, molestar a la fauna local o causar cualquier tipo de perturbación a los ecosistemas.
Hemos establecido contacto por el momento con los ayuntamientos de Tinajo, San Bartolomé y Yaiza, y seguimos pendientes de respuesta por parte del resto de ayuntamientos insulares (se mandó solicitud telemática por registro general en enero de este año, y emails posteriormente a concejalías de deporte) De momento no se nos ha concedido espacio en ninguno de los municipios en los que nos hemos reunido con las concejalías de deporte, pero sí que han dejado la puerta abierta a organizar puntualmente algún evento.
