Tal y como se preveía, la última eliminatoria de cuartos fue la más igualada de la primera ronda del torneo. Ambos equipos llegaban muy parejos al encuentro y así lo demostraron durante los cuarenta minutos reglamentarios. Muchas alternativas en el marcador, intensidad a raudales y dos porteras -Lulu Guerra y Virginia Fernández- inconmensurables.
Durante la primera mitad, a la que se llegó con empate (14-14), ninguno de los dos equipos fue capaz de distanciarse de su rival en más de dos goles. Costa del Sol Málaga llevó ventaja en el marcador durante gran parte de este primer acto, aunque el Rocasa también disfrutó tramos de ventaja en la contienda.
De hecho, las grancanarias comenzaron mejor la segunda mitad y pronto pusieron una ventaja de dos goles por delante (14-16). Fue el preludio de la primera ventaja de tres goles para las teldenses, que alcanzaban el minuto 40 con tres tantos por delante (18-21). Sin embargo, un parcial de 3-0 para las andaluzas devolvía en apenas cuatro minutos un nuevo empate al electrónico.
El partido avanzaba entre parciales de uno y otro equipo. Rocasa volvía a tomar ventaja con otro parcial de tres tantos (23-26) a menos de diez minutos del final e incluso tuvo ocasión para ampliar ventaja hasta cuatro goles, pero un meritorio final de partido para las locales llegaba con apretadísimo 27-28 a favor de las teldenses y con balón en ataque para las de Juan Moreno a medio minuto para el final del partido.
El Rocasa no conseguía anotar con apenas segundos por disputarse y el balón caía en manos malagueñas. Pero una discutible decisión arbitral mandaba el partido a la prórroga: tarjeta roja para María Gomes por sabotaje en la salida del balón del equipo anfitrión y, como consecuencia, se señalaba siete metros para las anfitrionas. Lulu Guerra no podía evitar el 28-28 que mandaba el encuentro al tiempo extra.
Una acción determinante para el devenir del partido ya que el Rocasa no supo reponerse al inesperado empate y, por el contrario, las malagueñas -espoleadas por su afición- se vinieron arriba. El primer tiempo de la prórroga terminó por decantar el partido de lado local, con una ventaja de tres goles (32-29) que el Rocasa, a pesar de intentarlo hasta la extenuación y con el increíble aporte de Ana Palomino en varias intervenciones de mérito, no pudo volver a contrarrestar.