Desde el 1 de enero de 2024, todas las personas que tengan gallinas en su vivienda o granja, incluso para autoconsumo, están obligadas a inscribirlas en el Registro General de Explotaciones Ganaderas (REGA). Las autoridades han lanzado un recordatorio a los propietarios de aves para evitar sanciones, que pueden ir desde los 600 euros hasta los 3.000 euros, e incluso alcanzar 1,2 millones de euros en casos graves.
Límite de 30 gallinas para consumo propio
La normativa establece que quienes posean gallinas ponedoras para consumo propio no pueden tener más de 30 ejemplares. El objetivo de esta regulación es garantizar la seguridad alimentaria, prevenir enfermedades aviares y mejorar el control sanitario de las aves.
Las autoridades recuerdan que el registro es fundamental para actuar rápidamente ante brotes de enfermedades como la gripe aviar, reduciendo riesgos tanto para la salud pública como para la industria avícola.
¿Cómo registrar las gallinas?
Los propietarios deben dirigirse a la Consejería de Agricultura de su comunidad autónoma o acceder a la sede electrónica del Ministerio de Agricultura para realizar el trámite. El incumplimiento de esta normativa puede derivar en sanciones económicas severas.
Si tienes gallinas en casa, asegúrate de registrarlas para evitar multas y contribuir a un control sanitario más efectivo.