La tensión crece en el barrio capitalino de El Toscal, donde un grupo de vecinos cerró una vivienda que había sido ocupada presuntamente por personas de origen magrebí, señaladas por los residentes como responsables de constantes molestias e intimidaciones en la zona.
Según los testimonios vecinales, la situación venía generando malestar desde hacía semanas, hasta que decidieron actuar por cuenta propia y bloquearon el acceso a la vivienda.
Pocas horas después, varios jóvenes identificados como MENAs (Menores Extranjeros No Acompañados) intentaron regresar al inmueble, pero fueron interceptados por agentes de la Policía Nacional, quienes evitaron un nuevo intento de ocupación.
La intervención policial evitó mayores incidentes, aunque los vecinos expresan su preocupación por la creciente sensación de inseguridad en esta zona emblemática de Santa Cruz. Reclaman mayor atención institucional y presencia policial ante lo que califican como una situación límite.