La búsqueda de Miriam, la vecina de 75 años desaparecida el pasado miércoles en Arona, ha tenido un desenlace trágico. Este domingo, poco después del mediodía, fue hallado el cuerpo sin vida de una mujer en las inmediaciones de Cabo Blanco, muy cerca de la vivienda de la desaparecida.
El hallazgo lo realizó un familiar que participaba en las labores de rastreo junto a efectivos de la Guardia Civil y decenas de voluntarios. Aunque aún falta la confirmación oficial de la identidad, todo apunta a que se trataría de Miriam, cuya ausencia había mantenido en vilo a la comunidad durante cuatro días.
Miriam, de origen uruguayo, padecía deterioro cognitivo, lo que hacía temer que se hubiera desorientado. Su desaparición activó una alerta nacional y un amplio despliegue de medios terrestres, aéreos y caninos. Durante jornadas enteras, vecinos y cuerpos de emergencia recorrieron senderos, barrancos y terrenos cercanos a Cabo Blanco con la esperanza de hallarla con vida.

