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Una menor de nacionalidad británica ha muerto en Gran Canaria a consecuencia de las secuelas provocadas por un ahogamiento sufrido el pasado jueves en un complejo turístico de Pájara, Fuerteventura.
La niña, que se encontraba de vacaciones con su familia, fue localizada en parada cardiorrespiratoria en la piscina del establecimiento. El socorrista del recinto logró reanimarla y estabilizarla antes de que fuera evacuada en helicóptero medicalizado al Hospital Universitario Materno Infantil de Gran Canaria.
A pesar de los esfuerzos médicos, la pequeña falleció ayer debido a los daños neurológicos ocasionados por la falta de oxígeno.
