Recortes Cero se adhiere a la Plataforma Canaria frente a la Emergencia Alimentaria

La coordinadora de Recortes Cero Canarias ha aprobado en su última asamblea adherirse a la
Plataforma Canaria frente a la Emergencia Alimentaria. Dicha plataforma nació a mediados de
septiembre con el respaldo de varios colectivos políticos y sociales, su objetivo es luchar contra la
escasez y la dificultad de acceso a alimentos.
Uno de los principales consecuencias que está teniendo la inflacción es la subida de los precios de
la cesta de la compra. Provocando que miles de familia se vean obligados a cambiar sus hábitos
alimentarios (teniendo una alimentación menos salubre) porque su poder adquisitivo no les permite
acceder a otros productos. Los monopolios de la alimentación (muchos de ellos en manos del
capital extranjero) están haciendo una caja sangrante atracando a la población, mientras
agricultores, ganaderos o pescadores sobreviven al borde de la quiebra por los altos precios del
combustible viendo como sus mercancías se venden al consumidor por cuatro, por ocho o por diez
veces su precio en origen.
Por esto mismo la plataforma se ha reunido este pasado jueves con el Consejero de Agricultura,
Ganadería, Pesca y Soberania Alimentaria para exigir la necesidad de declarar la “emergencia
alimentaria” y tomar las medidas necesarias para paliar esta situación. Desde la plataforma han
presentado también 11 propuestas que apuntan en el sentido de cambiar la situación en beneficio de
la mayoría. Siendo la principal poner fin a la especulación.
Desde Recortes Cero apoyamos completamente los objetivos y las medidas impulsadas por la
Plataforma Canaria frente a la Emergencia Alimentaria. La inflacción es un atraco de bancos y
monopolios, no solamente hay que exigir que la factura de esta crisis no la volvamos a pagar los
trabajadores, haciendo que pague más quien más tiene. Sino que estos especuladores tienen que
tener el mismo tratamiento que el crimen organizado, se les debe poner un coto a sus
multimillonarios beneficios y establecer un tope de precios para evitar que la alimentación se
convierta en un privilegio.