Desde que el Partido Animalista PACMA conoció el proyecto de la empresa Nueva Pescanova de abrir la primera granja de pulpos del mundo en Las Palmas de Gran Canaria, no han dejado de luchar contra lo que consideran una «aberración». «Hacinar a miles de estos animales es una crueldad y un paso atrás inaceptable, como han advertido numerosas personas expertas de diferentes ámbitos, y estamos haciendo todo lo posible para impedirlo», explica la coordinadora provincial de la formación política y una de las organizadoras del acto, Iris Sánchez.
PACMA y PETA han logrado congregar, en colaboración con Greenpeace, a más de 30 entidades de protección animal el próximo 25 de mayo a las 17:00 horas en la grancanaria Playa del Inglés para un nuevo internacional contra la granja de pulpos, como ya hicieron en 2022 y en 2023 con su campaña «Save The Octopuses».
La protesta se desarrollará simultáneamente también en Ciudad Real, Barcelona, Toronto, Londres, Zagreb, Helsinki, Jalisco, Uppsala y Quito. Será silenciosa y en ella se procederá a la lectura de un manifiesto recogiendo las características de los pulpos como animales inteligentes y sensibles que no deberían ser explotados, pidiendo al Gobierno de Canarias que no otorgue a la empresa pesquera los permisos necesarios para dar comienzo a las obras.
En mayo de 2022 y con el apoyo de 100 entidades de protección animal y medioambiental, PACMA presentó un dossier de alegaciones apelativas al bienestar animal y medioambiental de la isla, seriamente comprometidas según atestiguan.
Debido a la falta de legislación relativa al bienestar de estos animales, las últimas informaciones apuntan a que el método de sacrificio elegido podría ser la muerte por hipotermia al reducir drásticamente la temperatura de los tanques. Ello, sumado al pronóstico imprevisible de vertidos que este recinto podría generar, ha hecho saltar las alarmas de la comunidad científica.
