El Consejero de Sector Primario, Soberanía Alimentaria y Seguridad Hídrica del Cabildo de Gran Canaria, Miguel Hidalgo informó a los productores de tomate de la isla, sobre la propuesta del distintivo europeo Indicación Geográfica Protegida (IGP) Tomate Canario e invitó a los implicados a coordinar una estrategia conjunta.
Las empresas productoras de tomate de exportación de Canarias y la federación de exportadores Fedex Las Palmas se dieron cita en una reunión convocada por la Consejería en la Granja Agrícola del Cabildo. Además, se trasladará la información al Cabildo de Fuerteventura como ya se trasladó la pasada semana al de Tenerife, por ser las dos islas, junto a Gran Canaria, las que cuentan con capacidad de producción exportadora de este producto.
El principal objetivo de esta IGP es evitar el fraudulento uso del término “canario” en tomates producidos fuera del archipiélago y así aportar mayor valor a un producto que, si bien ha descendido en sus cantidades anuales de producción, tiene potencialidad para estabilizar sus volúmenes de comercialización e incluso diferenciarse de otros por su excelente calidad y modelo de producción sostenible, según afirma el propio sector y las administraciones que lo fomentan. Actualmente Canarias produce en torno a 300.000 toneladas de tomate de exportación al año, tanto del “tipo” canario como de otras variedades.
Hidalgo trasladó que el Cabildo de Gran Canaria tiene previsto entregar en 2025 el expediente de solicitud al órgano competente y resaltó que, aunque Gran Canaria es la isla con la mayor producción de tomate de exportación de Canarias, resulta imprescindible hacer “frente común y coordinado” para dejar la puerta abierta al resto de las islas.
El proceso para obtener esta IGP suele durar un año y comienza cuando se entrega el expediente al Instituto Canario de Calidad Agroalimentaria (ICCA) de la Consejería de Agricultura del Gobierno de Canarias. Dicho órgano es competente para elevar la solicitud ante el Ministerio de Agricultura y este último es quien, desde España como Estado Miembro de la UE, lo remite a la Comisión DG-Agri, única entidad capacitada para otorgar el citado distintivo.
IGP por reputación histórica
La producción y exportación del tomate en Canarias ha contribuido, además de en aspectos económicos, a dibujar la personalidad cultural y social de estas islas. La primera evidencia bibliográfica de la producción y exportación del tomate de Canarias es una publicación de 28 de febrero de 1885 en el periódico local El Liberal, donde un productor británico describía cómo colocar los tomates para su traslado en barco. Tomada la fecha de la publicación como inicio de la actividad, el próximo 28 de febrero se cumple el 140 aniversario de la misma en las islas. Es por tanto en su reputación histórica desde donde se fundamenta la argumentación para la solicitud de Indicación Geográfica Protegida Tomate Canario.
Los vientos alisios, la temperatura estable y primaveral y la cantidad de horas de sol al día fueron las condiciones que hicieron crecer una producción que llevaba y sigue hoy llevando a Europa un producto singular que dio nombre a una variedad: tomate “tipo canario” durante la temporada invernal. Y frente a que pueda parecer una ventaja, esta variedad genera hoy confusión desfavorable para nuestro tomate pues el “tipo” canario puede estar cultivado en cualquier lugar del mundo y con procesos productivos que podrían no cumplir los estándares de la UE.
