La Dirección General de Emergencias del Gobierno de Canarias ha declarado la prealerta por calima a partir de la medianoche de este domingo, 10 de agosto, en Lanzarote, Fuerteventura, Gran Canaria y Tenerife, debido al recrudecimiento del episodio de calor que afecta al archipiélago desde hace varios días.
Según las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) y otros modelos de predicción, mañana se registrarán las temperaturas más altas de esta ola de calor, con máximas generalizadas de entre 35 y 40 grados, y picos locales que podrían alcanzar 41 a 44 grados en zonas interiores de Lanzarote y Fuerteventura, así como en las medianías del sur y oeste de Gran Canaria y Tenerife. Las mínimas nocturnas también serán inusualmente elevadas, superando los 28 o 30 grados en algunas áreas.
El fenómeno se verá agravado por la llegada de calima a nivel superficial en las islas orientales y en las medianías y zonas altas de las occidentales orientales, lo que reducirá la visibilidad y podría afectar gravemente a personas con enfermedades respiratorias o crónicas.
Las autoridades recomiendan evitar actividades físicas en las horas centrales del día, permanecer en lugares frescos, hidratarse abundantemente, usar protección solar y mantener puertas y ventanas cerradas para limitar la entrada de polvo en suspensión. Se aconseja prestar especial atención a personas mayores, menores y enfermos crónicos, por ser grupos de mayor vulnerabilidad.
Ante el alto riesgo de incendios forestales, el Gobierno de Canarias insta a no arrojar colillas, fósforos o basura en zonas arboladas, ni utilizar petardos o cualquier artefacto con fuego en áreas agrícolas, forestales o próximas a viviendas. Asimismo, se recuerda la importancia de mantener limpios de vegetación seca los alrededores de las viviendas y cumplir las restricciones que marquen cabildos y ayuntamientos.
La previsión meteorológica indica que las temperaturas comenzarán a descender a partir del próximo jueves, 14 de agosto, aunque la situación seguirá siendo vigilada para tomar medidas adicionales si fuera necesario.
En caso de detectar humo o fuego, la población debe llamar de inmediato al 112.